LCC Luis Fernando López Parra
Mientras no haya controles o regulaciones efectivas contra la especulación no se podrá salir de la triple crisis económica que se enfrenta actualmente en el mundo, y esta situación puede ocasionar una recesión más profunda a nivel global, reveló el Dr. Jorge Sánchez Sandoval.
Al disertar la conferencia magistral “Crisis actual y las nuevas tendencias de la economía” ante estudiantes y docentes que participaron en el Simposio Interinstitucional Regional de Fomento a la Investigación, el docente universitario dijo que los acuerdos entre los gobiernos es la única opción para enfrentar la depresión.
“La crisis alimentaria se manifiesta con el incremento de la demanda de países emergentes como China e India, así como la escasez de inventarios y aumentos de precios de cereales, utilizados en la producción de biocombustibles, sustitutos del azúcar y como alimento para animales”, agregó.
En el caso de la energética, precisó el también director de la Unidad Académica de Negocios de la UAS, se da por la disminución de la producción del petróleo, ante el agotamiento de los pozos y el incremento de la demanda y los precios, que se refleja con estallidos de ira por parte de pescadores, camioneros, agricultores, taxistas y todos los profesionales más afectados.
“La crisis financiera comenzó en Estados Unidos, en agosto de 2007, con la morosidad de las hipotecas de mala calidad y se ha extendido por todo el mundo.
“Su capacidad de transformarse y de extenderse mediante la proliferación de complejos mecanismos financieros hace que esta crisis se asemeje a una epidemia fulminante imposible de atajar”, aseguró.
Sánchez Sandoval apuntó que las verdaderas causas de la triple crisis son la globalización y el neoliberalismo, la desinserción entre la economía-mercado y la sociedad-estado, así como entre la economía-inversión productiva y la economía monetaria- especulativa y la liberalización financiera mundial-los molinos satánicos.
“Las consecuencias de estas medidas son el crack de las bolsas de valores, los fraudes millonarios de Bernard Madoff, con más de 50 mil millones de dólares; y de James Nicholson, con 900 millones, entre otros etcéteras más, que finalmente son mucho más”, asentó.
Sobre los pronósticos que se hacen sobre la crisis citó las predicciones del premio Nobel de Economía 2008, Paul
Krugman, quien hace referencia a que se teme una década perdida y la cada día más cerca depresión por la interrupción de los flujos de capital internacional y la serie de crisis de divisas.
“Otro problema adicional es la trampa de liquidez, que es la situación del mercado monetario de un país, en la que la demanda de dinero se vuelve elástica, de forma que, pese al aumento de la oferta monetaria por parte de las autoridades del país, no se consigue modificar el tipo de interés, lo que significa que la política monetaria es completamente inoperante”, refirió el investigador universitario.
El doctor en Ciencias Sociales por la UAS dijo que son las ideas, como el neoliberalismo, y no los intereses creados, lo que resultan peligrosas para las naciones, pues de acuerdo con las teorías de John Maynard Keynes, Adam Smith, Von Hayek y Milton Fridman, siempre abogaron por un mercado que supuestamente se autorregulaba más eficientemente siendo libre.
“Pero cuando aparecieron las crisis se demostró que no hay tal autorregulación o equilibrio, ya que después de la Gran Depresión del 29 en el Siglo XX, o sea el mercado no se autorregula cuando hay fallas o imperfecciones en el mercado”, argumentó.
Sin duda, asentó, fue a partir de la teoría keynesiana o el keynesianismo que se propuso un estado-padre protector de la sociedad, que ajustase los fallos que el propio sistema creaba.
“Y su principal argumento es que el Estado puede intervenir en momentos de crisis para llevar la economía a un nivel de empleo pleno, lograr estabilidad en los niveles de precios y fomentar el crecimiento económico”, rememoró el especialista.
Adelantó que Paul Krugman recomienda que hay que hacer planes y sacar lecciones del pasado para enfrentar la crisis, y de esa forma estar en condiciones de superar los problemas económicos, financieros y sociales en el corto plazo.
“Siento que la actual crisis no se parece a ninguna de las que hemos visto en el pasado, pero sería más acertado decir que es idéntica a todo lo que hemos visto en el pasado con la particularidad de que, esta vez, todos esos elementos se dan simultáneamente.
“El estallido de la burbuja inmobiliaria comparable a lo que sucedió en Japón a final de los 80s; y una sucesión de pánicos bancarios como los que se dieron en los 30, pero ahora se dio en la banca de la sombra: mercado de futuros, bolsa virtuales, paraísos fiscales, etcétera”, añadió Sánchez Sandoval.
El catedrático universitario auguró que se tendrá que trabajar fuertemente en un nuevo Bretton Woods, para un acuerdo multilateral que estabilice las finanzas internacionales del siglo XXI, como cuando se establecieron el FMI y el Banco Mundial, que sirvió para lo mismo durante la segunda mitad del siglo pasado.
“Ahora que se dio la reunión del Grupo de los 20, en Londres el pasado 2 de abril, hubo acuerdo de acciones concretas, como fortalecer a los organismos internacionales, y en particular al FMI, lo cual deberá ir acompañado de alguna reforma sustancial en el futuro creo”, aseguró.
De igual forma, indicó, se acordó de que una crisis global exige una solución global, por lo que la economía mundial abierta basada en los principios del mercado, requiere de una regulación eficaz y con instituciones globales fuertes.
“También se buscará restablecer la confianza, el crecimiento y el empleo; reparar el sistema financiero para restaurar el crédito; reforzar la regulación financiera; financiar y reformar las instituciones financieras para superar la crisis y evitar crisis futuras”, ejemplificó el perito económico.
Además, resaltó, se pretende trabajar para fomentar el comercio y la inversión globales y rechazar el proteccionismo para apuntalar la prosperidad; y construir una recuperación inclusiva, ecológica y sostenible.
“Los acuerdos alcanzados hoy constituyen un programa adicional de 1,1 billones de dólares de apoyo para restaurar el crédito, el crecimiento y el empleo en la economía mundial”, recordó Sánchez Sandoval.
Las medidas son las siguientes:
-Triplicar los recursos a disposición del FMI hasta los 750 mil millones de dólares; apoyar una nueva partida de Derechos Especiales de Giro (DEG) de 250 mil millones de dólares y al menos 100 mil millones de dólares en préstamos adicionales por parte de los bancos multilaterales de desarrollo (BMD); garantizar 250.000 millones de dólares de apoyo para la financiación del comercio; y utilizar los recursos adicionales de las ventas de oro acordadas por el FMI para la financiación concesional de los países más pobres.
-Emprender una ampliación fiscal concertada.
-Los bancos centrales también han tomado medidas excepcionales:
a) Reducción de los tipos de interés.
b) Mantener políticas de expansión durante el tiempo que sea necesario.
c) Y utilizar toda la gama de instrumentos de política monetaria, incluidos los instrumentos poco convencionales, que estén en concordancia con la estabilidad de precios.
-Tomar todas las acciones necesarias para restablecer el flujo normal del crédito a través del sistema financiero
-Tomar medidas para crear un marco supervisor y regulador más fuerte y globalmente más coherente para el futuro sector financiero
-Resistir al proteccionismo y promover el comercio y la inversión mundiales
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